1580 - 1590. Cristal de roca / cuarzo hialino, Lapislázuli, Oro, Perlas, Plata dorada
Fuente
de perfil ovalado, en cristal de roca de una sola pieza, con una
guarnición al pie y otra al borde. Esta última forma una ancha franja
moldurada y de picado de lustre, con sobrepuestos de oro esmaltado que
siguen un diseño de ces y roleos -esmaltados en blanco, negro, celeste y
verde claro opacos, y rojo y verde de transflor-, y marcos similares
donde se insertan doce camafeos de lapislázuli. La pequeña guarnición
que forma el ruedo de asiento se enriquece con un diseño que alterna
doce eses esmaltadas y doce perlas de las que, según el inventario de
1746, faltaban tres, repuestas posteriormente. Sin embargo, no se
conservan las perlas o piedras que, en su día, enriquecieron cada uno de
los sobrepuestos de la guarnición exterior. La pieza, por sus
dimensiones y ejecución, constituye toda una proeza técnica. En su
superficie se ha labrado una historia secuencial a modo de anillo, con
varios episodios narrativos unidos a través de un paisaje continuo de
arboledas y lontananzas, que se desarrolla expandiéndose hacia el ala de
la fuente, y con una composición que presenta vacíos en una de las
mitades, resueltos con un par de aves volando. Se narra aquí visualmente
la historia de Hermafrodito, basada en las Metamorfosis de
Ovidio, empezando con la unión de Hermes y Afrodita, cuyo fruto es
Hermafrodito, que es cuidado en su infancia por las ninfas, quienes se
ocuparan de su educación. A continuación, ya convertido en un esbelto
muchacho, se lo ve marchando, lanza en mano y precedido por Cupido, por
un camino en el que la distancia es sugerida por varios parajes y dos
ciudades en la lejanía. En la siguiente escena aparece descansando junto
a un manantial, momento en el que es requerido por la ninfa Salmacis,
habitante de las aguas, que se ha enamorado del joven y de la que éste
no consigue escapar. Al bañarse en el lago, la ninfa se abraza
fuertemente a él y ruega a los dioses que la fundan en un solo cuerpo
con su amado, cosa que, en efecto, le conceden, creando un ser de doble
sexo, representado aquí con dos cabezas, femenina y masculina. En la
base de la fuente se han abierto unas ondas marinas, paralelas a la
guarnición interna, más estrecha, y en ellas se presentan luchas y
encuentros de seres marinos, como tritones, centauros de mar o náyades,
en una recreación del océano y sus habitantes.
En 1927, Ernst Kris
ya consideró que esta fuente era obra del taller de los Sarachi,
opinión que compartía Diego Angulo en 1944 y que concuerda con la
crítica posterior. El especifico tratamiento de perfiles, manos,
ropajes, arboles, plantas, aves y demás corresponde a un lenguaje
técnico y estético muy próximo al de distintas obras atribuidas a este
taller, entre ellas la Copa de la Vendimia .
Asimismo, la historia principal podría estar basada en un diseño de
Annibale Fontana. Acerca de la guarnición, ya Kris se planteaba si el
ancho labio de oro con sobrepuestos esmaltados y camafeos podría ser
español, algo nada fácil de determinar, ya que sigue un estilo
internacional. Posteriormente, Venturelli considero todas las
guarniciones como originales, y atribuyo los excelentes camafeos a
Fontana, cuñado de los hermanos Sarachi, si bien la cuestión sigue
abierta. El análisis de esta pieza se complica aún más en el caso de las
escenas representadas, pues la historia de Hermafrodito no es un tema
frecuente, y es de suponer que sería un encargo destinado a un cliente
determinado. Se ha querido hacer una lectura directamente relacionada
con el mito ovidiano sobre el poder del agua y la unión amorosa, así
como con el llamado Hermafrodito de Leonardo da Vinci y el Trattato dell’arte della pittura
de Giovanni Paolo Lomazzo. Sin negar esta posibilidad, pueden existir
otras lecturas, ya que, de referirse únicamente a lo mencionado, la
presencia de los Doce Césares sería incoherente y estaría fuera de
lugar. Sean coetáneos al trabajo en cristal o una adición posterior,
obligan a proponer otras interpretaciones del mito representado, pues el
motivo de Hermafrodito contiene una carga teórica enorme, tanto desde
el punto de vista de la filosofía neoplatónica como de la alquimia,
según se entendían ambas en el ambiente culto del segundo Cinquecento.
Ello nos acerca, una vez más, al pensamiento de Marsilio Ficino, que
influyo poderosamente en el ámbito culto milanés, lo que no impide que
pueda existir una tercera perspectiva, la política, quizás relacionada
con los Habsburgo españoles, pues la conquista de los mares es imagen de
los grandes imperios.
Es una de las piezas pertenecientes al
Tesoro del Delfín, el conjunto de vasos preciosos que, procedentes de la
riquísima colección de Luis, gran Delfín de Francia, vinieron a España
como herencia de su hijo Felipe V, primer rey de la rama borbónica
española. Luis de Francia , hijo de Luis XIV y María Teresa
de Austria, comenzó su colección tempranamente influenciado por su
padre. La adquisición de obras se producía por diversas vías, desde
regalos hasta su compra en subastas y almonedas. Al morir el Delfín,
Felipe V recibe en herencia un conjunto de vasos con sus
respectivos estuches, que fueron enviados a España. En 1716 estaban en
el Alcázar de Madrid, desde donde se trasladaron, en fecha posterior, a
La Granja de San Ildefonso, lugar donde se citan a la muerte de Felipe
V, conservados en la llamada Casa de las Alhajas. En 1776 se
depositaron, por real orden de Carlos III, en el Real Gabinete de
Historia Natural y continuaron en la institución hasta el saqueo de las
tropas francesas en 1813. La devolución de las piezas se produjo dos
años más tarde y con algunas pérdidas. Fue en 1839 cuando la colección
llega al Real Museo, donde sufrieron en 1918 un robo. Con ocasión de la
Guerra Civil española fueron enviadas a Suiza regresando en 1939, con la
pérdida de un vaso, desde entonces se encuentran expuestas en el
edificio Villanueva
(Texto extractado de Arbeteta, L.: El Tesoro del Delfín. Catálogo Razonado, 2001, pp. 116-117, y de Idem: Arte transparente. La talla del cristal en el Renacimiento milanés, 2015, pp. 104-109).
https://www.museodelprado.es/coleccion/obra-de-arte/fuente-con-la-historia-de-hermafrodito-y-camafeos/c7e7de23-0139-4523-9ca6-1dfc83a0810a
No hay comentarios:
Publicar un comentario