El término grafía proviene del verbo griego que designa la actividad gráfica tanto de la escritura como del dibujo. Ya en la Grecia Clásica se diferenciaba entre pintura, dibujo y escritura, no así en los países de Extremo Oriente, China y Japón, donde se sigue designando con un mismo término, hua. En el dibujo, la característica primordial es el trazo o la línea, y aunque cualquier soporte sea válido, el más empelado es el papel. Las técnicas empleadas son varias, pero se basan en marcar con puntas afiladas o dibujar con diferentes materiales, siendo su tiempo de ejecución normalmente breve. Sobre sus dimensiones debemos decir que por lo general son siempre reducidas.
Cabeza Nuclear de un Ángel, 1952, Tinta negra, sepia y lápiz sobre papel, Salvador Dalí
Los materiales primigenios en la Prehistoria eran materiales naturales (el propio interior de las cuevas). La técnica más antigua consistía en dibujar con los dedos de las manos. Primero lo hicieron en superficies blandas como la arcilla o el barro, y más tarde con materiales duros, como huesos, guijarros o buriles (en las propias rocas mediante incisiones). Posteriormente utilizaron metales y cerámicas donde dibujaban con trozos de piedra, y terminaron empleando puntas metálicas. Todo lo que tenían era natural, los tintes y colores son de origen vegetal y mineral: el negro procede del carbón y los ocres y rojos del manganeso o del mismo ocre, pero ¿cómo trabajaban?Podían aplicar directamente con el colorante utilizado (primero harían un grabado y luego lo rellenaban), o disolvían el color en alguna grasa animal para garantizar la fijación, aunque también pudieron emplear la técnica del tamponado o laaerografía, es decir, soplando el color sobre una roca (con una especie de cerbatana).
Caballos en el gran panel, cueva de Ekain, Gipuzkoa
En el Antiguo Egipto encontramos el papiro (origen de la palabra papel), que se obtiene del tallo de una planta muy abundante en las orillas del río Nilo. Con el tiempo fue decayendo la utilización del mismo dando paso al pergamino (universalizado en época de Alejandro Magno), un material más duro y menos perecedero, especialmente en zonas menos secas que Egipto. Se obtiene de la piel de una res (ternera, oveja o cabra) y primero se limpia de pelos, después se adoba para evitar que se ablande y por último se estira. El papel, por su parte, era conocido en Chinadesde el siglo II a partir de los residuos de la seda, del arroz y del cáñamo. Su empleo se generalizó en Europa a partir del siglo XV gracias a los Árabes, quienes lo introducen a finales del siglo XI.
Minotauro y caballo, 1935, Pablo Picasso. Técnica: Lápiz sobre papel.Museo Picasso, Paris
Materiales, Utensilios e Instrumentos
Ya con la llegada del papiro, del pergamino y sobre todo del papel se experimentan nuevos instrumentos y técnicas. Se destacan las siguientes:
La Punta Metálica
–Estilete con Punta de Plomo: finas varillas de plomo o plomo y estaño. Su trazo es negruzco. Puede ir decolorando hasta la desaparición por la oxidación.
–Estilete de Punta de Plata: utilizado por los romanos para dibujar sobre tablillas, su uso se extiende entre los siglos XIV-XV en pergaminos. Necesita un fondo preparado o coloreado sobre el que deja un trazo brillante. En un principio el dibujo con estilete se utilizó como preparación de la mano para dibujar con pluma o realizar apuntes, aunque algunos artistas le dieron mayor categoría realzando los dibujos con albayalde (conocido como Blanco de España), pues así se aclaran tintas y se producen efectos de luz.
Cabeza de anciano cubierto por una gorra, 1436-37, Lorenzo di Credi. Técnica: punta de plata y blanco de plomo sobre papel preparado en gris y en rosa.Museo del Louvre
La Pluma
Primero se usaban de caña, para más tarde utilizar de oca, pavo, cuervo o cisne. Fueron habituales hasta el siglo XIX, cuando son sustituidas por el lápiz y se puede usar con distintos tipos de tinta:
–Tinta China: de color negro brillante.
–Tinta de Ácido Tánico: de color marrón.
–Bistre: proviene del hollín.
–Sepia: obtenida de la sepia, se diluye en agua a distintas concentraciones y a la que se añade goma arábiga.
Paisaje a orillas del Arno, 1473, Leonardo da Vinci. Técnica: pluma y tinta sobre trazado con estilete, con retoques de tinta más oscura.Galería de los Uffizi
El pincel
Dos partes: una rígida generalmente de madera y otra, la punta, de pelo de animal. Uso: mojado en las tintas y aplicado sobre el soporte. Como ejemplo, uno de tantos, tenemos esta obra de Goya sobre un papel verjurado ahuesado.
Moza subiéndose una media, 1796-97. técnica: pincel y aguada de tinta china Museo del Prado
El Carboncillo y Lápiz Negro
Se obtiene por la carbonización de ‘palitos’ de madera. Utilizado para trabajos preparatorios o apuntes por la facilidad con la que se borra, artistas como Milleto Courbet utilizaron comúnmente esta técnica. En el caso de Tintoretto fue la técnica de dibujo que siempre utilizó. El lápiz negro es un tipo de lápiz arcilloso y blando utilizado primero como barrita y después como mina. Se utiliza solo o en compañía de otra técnica, como la sanguina, el albayalde o el clarión.
Autorretrato con pipa, hacia 1848, Gustave Courbet. Técnica: carboncillo
Piedra de Italia
También conocida como piedra negra, es una piedra negra arcillosa y blanda que puede raspar el papel ya que contiene cristales de sílice. Característico es su trazo, ancho, que hace que la obra coja fuerza.
Hércules y Antaeus, 1513, Luca Signorelli. Técnica: piedra de Italia.
Sanguina
Arcilla ferruguinosa, se conoce también como lápiz rojo. Las encontraremos en barritas y en lápices con variantes de color, y es muy empleada desde el siglo XV. Además, se emplea para dibujar a gran escala y en ocasiones se utiliza combinada con el lápiz negro. No se puede olvidar el Clarión, es decir, la pasta blanca sobre yeso y talco que suele emplearse con el lápiz negro y la sanguina y que dota a la obra de luz. Tampoco debemos olvidar el albayalde, también conocido como blanco de plomo y blanco de España. Su color toma su nombre y se emplea para ofrecer luz a los dibujos realizados en pasta o tinta.
Autorretrato, Leonardo da Vinci, 1515-16, Sanguina. Palacio Real de Turín. Italia.
El Pastel
Es una pasta constituida por pigmentos minerales o vegetales en polvo mezclada con diferentes sustancias como goma arábiga, jabón de Marsella, agua de cocer lino o cebada. La pasta se moldea en barritas cilíndricas de diferente dureza (depende de las sustancias utilizadas). Se puede emplear sobre cualquier superficie áspera que retenga una parte del color aplicado con una ligera presión.
Mujer en su lavabo, 1889, Edgar Degas. técnica: pastel sobre papel
Evolución histórica del Pastel
-Siglos XV y XVI: se usaba para finalizar los retratos realizados con otras técnicas otorgándoles color.
-Siglo XVII: es cuando alcanza su máximo esplendor, pues los colores proporcionados por los pasteles iban de la mano con el Estilo Rococó.
-Siglo XIX: Edgar Degas rompe con la tradición de delicadeza y luminosidad y renueva la técnica aplicando capas sucesivas.
La Bebedora, Toulose-Lautrec, Pastel negro y azul, pincel y tinta negra sobre papel, 1887/88 Albi. Musse Toulose-Lautrec.
La Acuarela
Se compone de pigmentos pulverizados que se mezclan con goma arábiga y se diluyen en agua en la proporción deseada. Destaca en la técnica su transparencia y luminosidad, y durante los siglos XVII y XIX adquiere bastante relevancia.
Venecia, vista de la Giudecca, salida del sol, 1819, Joseph M. W. Turner. Técnica: acuarela
El Gouache
Comparte con la acuarela sus elementos pero se le añade yeso blanco de plomo, que le aporta opacidad. Se utiliza sola o en combinación con otras técnicas. Ha sido muy utilizada por algunos artistas contemporáneos, como Picasso, Picabia o Malevich.
Desnudo azul, 1952, Henri Matisse. Técnica: Papel imprimado con gouache recortado.
La importancia del dibujo en las técnicas artísticas
Se estudia, dentro del arte rupestre, que a lo máximo que aspiraban los seres humanos de la prehistoria en materia pictórica era la dominación del contorno en el dibujo. Este anhelo perdura en la historia del arte, sintiéndolo también los artistas de la grecia arcaica. Y es que el dibujo forma parte de la vida del ser humano, al menos parte de su vida artística, así tenemos los famosos puntos, signos, trazos, en las cuevas paleolíticas. De esta forma, los llamados primitivos plasmaban su concepción del mundo circundante. Se habla así de un dibujo que representa no sólo lo que vemos sino también una idea, un símbolo. Pero ahí quedaba la cosa (o eso parece), en el signo y en el trazo, no así a medida que avanza la historia, donde el dibujo es una proyección, un fundamento de la arquitectura, escultura y pintura. Se entiende como un fundamento pues se concibe como un paso previo, como un boceto, aunque también como un arte en sí mismo.
Cartón preparatorio para La Escuela de Atenas, 1509. Biblioteca Ambrosiana, Milán. Técnica: carboncillo sobre trazos a la sanguina.
Sobre esto último ya se hablaba en la Italia del Quattrocento, y Cennino Cennini, como otros artistas e intelectuales, consideraban el dibujo como algo intrínseco del intelecto, como una expresión directa del conocimiento. Estos intelectuales valoraban la línea como elemento definitorio del dibujo y de la pintura, aunque otros, de la misma época, mantenían que era el color, como la llamada escuela veneciana. Por último tenemos la luz como elemento predominante, que así lo creía Leonardo da Vinci. Como vemos, es en el Renacimiento cuando el dibujo se aprecia para el aprendizaje, y se inauguran escuelas de diseño, como la romana Accademia nazionale di San Luca, por Federico Zuccari. Es así que poco a poco se codifican modos de ejecutar un dibujo, ya sea realizando un apunte (con toques ligeros y esbozados), un perfil (serían las primeras líneas en torno), un acabado o preparatorio (dándole importancia a los contornos, la luz, la profundidad, los colores) o mediante un cartón del mismo tamaño que la obra y con todos los detalles.
Boceto para el rapto de ganímedes, obra de Miguel Ángel, 1533. Fogg Art Museum. Harvard University. Cambridge. Massachusetts. USA.
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